En diálogo con Canal E, el periodista Tiago O’Ryan, desde La Paz, analizó el sorpresivo resultado electoral en Bolivia y el impacto regional de un giro hacia la derecha.
Rodrigo Paz lidera, pero habrá balotaje
“Fue un balde de agua fría, realmente fue algo muy sorpresivo”, expresó con contundencia el periodista al referirse al resultado electoral que posicionó al conservador Rodrigo Paz como el candidato más votado en Bolivia.
Con un 32,1% de los votos, Paz se impuso sobre Jorge ‘Tuto’ Quiroga, quien obtuvo un 26,81%, pero no logró evitar el balotaje. “No le alcanzó, no tuvo el 10% de diferencia, ni tampoco el 50% más uno”, explicó O’Ryan.
Lo más llamativo del escenario fue la caída de Samuel Doria Medina, uno de los favoritos. “No apareció dentro de las primeras opciones”, afirmó el periodista, destacando el contraste con la estrategia más silenciosa de Paz.
“Rodrigo Paz, quien hoy por hoy lidera estas elecciones, fue muy tranquilo en su estrategia”, analizó. Mientras sus rivales se enfocaban en redes y medios, Paz apostó por un perfil bajo que resultó efectivo.
Fin del ciclo del MAS y señales de cambio regional
El gran perdedor de esta elección fue el Movimiento al Socialismo (MAS), fuerza que gobernó Bolivia durante dos décadas. “Es un rompe esquemas, un giro en todo sentido”, sostuvo O ‘Ryan, destacando que “después de 20 años, la gente votó hacia la derecha por la crisis económica y política”.
La pérdida de poder de la izquierda boliviana refleja un descontento social profundo. “No han encontrado una solución ni a largo plazo ni a corto plazo”, señaló. Según O’Ryan, esta transformación podría tener repercusiones regionales: “Es una oportunidad para que empresarios logren tener relaciones con el exterior”, opinó, refiriéndose al impulso económico que podrían generar nuevos liderazgos.
Aunque los nuevos líderes no prometen transformaciones instantáneas, “intentan con una semilla de cambio mantener una realidad diferente para la población boliviana”, indicó el periodista.
Consultado sobre la reacción del ala dura del MAS, O’ Ryan fue claro: “Han mostrado un rechazo bastante fuerte hablando de votos arreglados”. Incluso mencionó hechos insólitos como intentos de robo de urnas y campañas por el voto nulo. “Mostraron una negación al no estar su líder Evo Morales dentro de la papeleta”, agregó.
La resistencia de sectores leales a Morales será un factor clave a seguir en los próximos meses, especialmente si se agrava la tensión en la segunda vuelta. No obstante, el clima actual es de cambio: “Bolivia siempre se ha caracterizado por tener un pueblo bastante revolucionario, que no permite que ciertas leyes los afecten directamente”, reflexionó O’ Ryan, dejando abierta la posibilidad de nuevos sacudones políticos.