A casi dos meses del inicio del programa de vacunación contra el dengue en la Provincia de Buenos Aires, las autoridades anunciaron que se amplió la iniciativa y que se extenderá a todo el territorio bonaerense.
El Ministerio de Salud provincial comunicó que se incorporaron al plan sanitario los 95 municipios que no integran el Area Metropolitana Buenos Aires (AMBA). Es que el 1° de octubre la estrategia preventiva se había circunscripto a los distritos que rodean a la Capital Federal donde, consideran los expertos, existe mayor riesgo de contagio.
Las autoridades sanitarias ya enviaron los turnos y a partir de los primeros días de diciembre serán citados a los centros para aplicarse la dosis.
De acuerdo con el relevamiento que tiene el ministerio, se concederán 2.253 turnos a personas del interior, que cumplen con los requisitos y están registrados en el Sistema Nacional de Vigilancia Sanitaria (SNVS), es una herramienta que se utiliza a nivel nacional en Argentina para recopilar datos sobre casos de enfermedades de notificación obligatoria.
Hasta el momento, la campaña de vacunación contra el dengue tuvo dos etapas. Ambas para personas que viven en municipios bonaerenses de la Región Metropolitana de Buenos Aires. En esa región -la de mayor concentración del país- están registradas por el SNVS, 82.000 personas en condiciones de recibir la medicación y se vacunaron 13.000
Por cuerda separada hubo 41.300 bonaerenses que se inscribieron en la aplicación «Mi Salud Digital» y se vacunaron 22.000. Se trata de hombres y mujeres que resultaron infectadas o se supone que contrajeron la enfermedad y no figuraban en el registro.
Las condiciones para estar en alguna de esas dos categorías que les permiten acceder a la medicación preventiva es haber contraído dengue la temporada pasada y tener entre 15 y 59 años.
En el mercado y por fuera de estos dispositivos oficiales, el medicamento cuesta entre $ 90.000 y $ 100.000. Algunas obras sociales o prepagas cubren porcentajes de ese monto. Se requiere la aplicación de dos dosis. La segunda debe aplicarse al menos tres meses después de la primera. La protección completa se obtiene 10 días después de la segunda inyección.
Según aclararon en el organismo que conduce Nicolás Kreplak, «primero se convocó a las personas del Área Metropolitana, porque allí se encuentran los municipios que en la última temporada se vieron más afectados por brotes de la enfermedad«.
Desde esta semana se convocará a quienes tuvieron dengue en cualquier municipio de la provincia en el que residan.
Quienes hayan tenido dengue hace poco tiempo deberán esperar seis meses para recibir la vacuna.
Explicaron también que la inmunización está contraindicada durante el embarazo y la lactancia, en personas inmunocomprometidas o en quienes reciben tratamiento de quimioterapia o corticoides a altas dosis. Para más información, ingresar a www.gba.gob.ar/dengue o llamar al 148.
El programa en CABA
En la Ciudad de Buenos Aires, el criterio de vacunación contra el dengue es diferente. El 1° de noviembre se sumaron los jóvenes de 20 a 24 años. Un mes antes, había arrancado el plan con los adolescentes de 15 a 19 años. En todos los casos los turnos están disponibles en la web del Ministerio de Salud del GCBA. «De acuerdo a la disponibilidad de las vacunas seguiremos progresando por grupos de edad«, explicaron en el Gobierno porteño.
También difiere la estrategia impulsada por el Gobierno nacional. El Ministerio de Salud de la Nación comenzó a distribuir las vacunas tetravalentes a mediados de septiembre para avanzar en la «vacunación focalizada» y complementar las dosis ya adquiridas por las provincias.
Según se explicó, en abril de 2024 la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn) recomendó que, por la situación epidemiológica actual, la vacuna no es para incorporar al Calendario Nacional de Vacunación, ni se debe implementar en todas las jurisdicciones del país. Debe hacerse a través de «una estrategia focalizada a nivel departamental considerando escenarios de alta transmisibilidad de la enfermedad».
Hace casi tres meses, la Provincia estableció un acuerdo con Takeda, el único laboratorio del mundo que produce una vacuna aprobada para el dengue, y compró 500 mil dosis de la vacuna Qdenga. Explicaron entonces que era para afrontar la epidemia que se espera para este verano. El ministro Kreplak proyectó que esta temporada estival habría un fuerte rebrote que resultaría «desquiciante» para la población. También criticó la ausencia de una estrategia nacional para abordar la enfermedad y la «falta de criterios unificados» en relación con la vacunación.
Más allá de las diferencias sobre la política de inoculación, los equipos del Ministerio de Salud bonaerense insisten en que la medida más efectiva contra el dengue consiste en descacharrar durante todo el año, es decir, eliminar los posibles criaderos de mosquitos y, de este modo, el riesgo de que se reproduzcan y transmitan la enfermedad.
AS